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martes, febrero 13, 2007

UN CAMPEÓN INCONTESTABLE

Viendo el desarrollo que ha tenido la Copa del Rey de baloncesto disputada el pasado fin de semana en Málaga, nadie podrá discutir la justicia y lógica del inapelable triunfo azulgrana, pero la realidad es que, antes de que empezara a botar el balón, apenas nadie daba un céntimo por el equipo entrenado por Dusko Ivanovic, y no precisamente por falta de potencial, sino por la escasa solidez que venía mostrando hasta ahora.

Los 4 días más apasionantes del deporte español de cada año nos han dejado, por primera vez en mucho tiempo, la sensación de que, salvo el campeón, nadie puede sentirse especialmente satisfecho de la competición disputada salvo, quizá, el Gran Canaria. Los canarios plantaron cara al principal favorito de esta edición, el Real Madrid, en cuartos de final, cediendo por tan solo 3 puntos de diferencia.

Hecha esta salvedad, el resto de equipos tienen más bien pocos motivos para sacar pecho. En primer lugar, el Caja San Fernando dejó una imagen de conformismo deplorable en su partido de cuartos contra el Tau, saliendo prácticamente derrotado del vestuario. Unicaja y Girona fueron los otros dos equipos derrotados en cuartos de final, pese a que ambos llegaban como cabezas de serie. Los de Scariolo cayeron sin apenas chistar ante el Barcelona mientras que los gerundenses tuvieron su cruce ante el DKV Joventut controlado hasta que, a cinco minutos del final, Aíto García Reneses ordenó una zona 1-3-1 y dio entrada a un, hasta entonces, inédito Marcelinho Huertas, que resultó clave al forzar la prórroga en el último segundo.

Ya en semifinales, el Tau tuvo en jaque al Madrid durante casi todo el encuentro, pero no lo supo rematar y en la recta final los de Plaza no perdonaron. En el otro enfrentamiento, el Barça rompió su mala racha contra el Joventut (los verdinegros se habían impuesto en los últimos cuatro enfrentamientos) en un enfrentamiento marcado por un demoledor 19-0 en el tercer cuarto que hizo estériles los posteriores intentos de remontada de los de Aíto, pese a que llegaron a ponerse a 6 puntos.

Más sorprendente, si cabe, fue el desarrollo de la final, donde el Barça barrió desde el salto inicial al líder de la fase regular propiciando la anotación más baja en una final de Copa. Este triunfo despeja algo las dudas y refuerza la posición del discutidísimo técnico montenegrino ahora que su equipo entra en la fase decisiva de la temporada. Jordi Trías fue elegido el MVP del equipo que lidera Juan Carlos Navarro.

Saludos.

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